18 de noviembre de 2011

Personaje de la semana: Abbed


El personaje de esta semana tiene dos intenciones, en primer lugar y como siempre reivindicar a un personaje, y por otro lado en esta ocasión me gustaría reivindicar una serie, que esta semana ha sido (desafortunada) actualidad. Y es que unas de las noticias de la semana es la retirada, esperemos que temporal, de Community de la parrilla de la NBC.

Abbed es encarnado por el actor Danny Puddi nacido en Chicago (1979) pero con raíces indias y polacas. Sus primeras apariciones en la televisión fueron en varios anuncios televisivos para Mcdonalds o T-Mobile, entre otros. Ya en el ámbito de la televisión tuvo su primera aparición en 3 episodios Urgencias. También le hemos podido ver en las Chicas Gilmore(4 episodios) o en un capítulo de El Ala Oeste de la Casa Blanca. En el año 2009 firmaría por la serie Community para encarnar el rol de Abbed, papel por el que se encuentra en esta sección.


Abbed es la representación de la serie, es el espíritu hecho carne, un batiburrillo raro y brillante de referencias a la cultura pop, un personaje que se sale de la misma ficción, que en ocasiones se sale del papel para ponerse en los ojos del espectador. Ya que de momento he hablado muy poco de comedia en el blog (mea culpa) aprovecho la entrada para recomendar encarecidamente la serie, hay pocas comedias más originales en la actualidad.

Como siempre he buscado una selección de las mejores escenas del personaje, en esta ocasión, los mejores momentos de Abbed con Troy. Aviso Spoilers de las 2 primeras temporadas de Community. Cool! Cool! Cool!



17 de noviembre de 2011

Primeras Impresiones: Boardwalk Empire(2ª temporada)


Hablar de Boardwalk empire es hablar del estreno más ambicioso del Otoño pasado en la cadena HBO. Una serie que como ya sabréis tiene como productor a Martin Scorcese, el cual también dirigió su capítulo piloto. Fue un boom su estreno, nadie se lo quiso perder, era difícil no encontrar blog analizando la nueva incursión de la mítica cadena en el mundo de la mafia (después de la más que aclamada Los Soprano). Y las conclusiones para nada fueron negativas, yo personalmente hubiese dado como bueno el que no le cayeran demasiados palos porque el hype que llevaba sobre sus espaldas la serie, era tremendo. Para mí, un amante de las películas de mafiosos y de Scorcese, fue una temporada correcta por lo general, pese a una producción cuidadísima, unas buenas actuaciones y unos diálogos marca de la casa. Siempre tuve la impresión de que todo era muy frio, la serie no terminaba de ganarme, no sé si era el antes mencionado Hype que arrastraba o que aún me faltaba meterme en el complejo y fascinante mundo de las bandas organizadas durante la época de la ley seca.

Eso sí tengo que matizar que todo esto es desde mi punto de vista, quizás más crítico por las altas expectativas depositadas sobre la serie. En lo referente a la crítica fue un auténtico éxito, como prueban su Globo de Oro y su nominación a los Emmy.

Una vez vistos los cuatro primeros episodios de la segunda temporada de Boardwalk Empire, tengo el porqué, he descubierto que le faltaba a su primera temporada. Y es que desde el primer momento en esta temporada la serie tiene muy claro por dónde quiere ir, con la pertinente presentación de los personajes, muy a lo HBO es decir tomándose su tiempo. A diferencia de la pasada temporada, donde en más de una ocasión tenía la sensación de perderse entre tanta localización y tanto personaje (en detrimento de la narración de una historia).En muchas ocasiones me parecía asistir a las mismas situaciones una y otra vez, esas fiestas en las que Nucky ejerce de amo y señor de Atlantic City, el personaje de Darmody aún está en pañales y dista mucho de lo que está dando de sí esta temporada y es mucho más “tranquila” en comparación a esta, brillando la acción por su ausencia. En resumen me pareció una temporada preliminar, un capitulo introductorio demasiado largo.

A partir de aquí Spoilers. En solo 4 capítulos ha conseguido lo que en los 12 capítulos de la anterior no pudo, esta segunda temporada está siendo una gozada, ha conseguido ganarme definitivamente porque la pugna entre Darmody y Nucky nos está dejando con momentazo tras momentazo, porque se vislumbra un cambio de generaciones en el crimen organizado de las principales ciudades americanas, es un gustazo para todo aquel amante del tema ver como Al capone poco a poco va subiendo escalones, a Lucky Luciano y su ambición.

Se le está dando más protagonismo a Chulky (el eterno Omar Little), sirviéndonos de excusa para conocer un poco mejor los conflictos entre los afroamericanos y el Ku Klux Klan y sin olvidarme de ese rey renacido, ese personaje casi anacrónico que es el comodoro, ejerciendo de tutor y mentor del joven Darmody. Boardwalk Empire me está consiguiendo ilusionar, con los personajes ya asentados, un rumbo muy claro y con la acción que le faltaba en la anterior. Boardwalk oposita para nueva joya HBO manteniendo el nivel de estos capítulos no lo dudo, parece que sí, que de nuevo la HBO ha dado otra vez con la tecla, Boardwalk empire apunta alto, muy alto.

13 de noviembre de 2011

Los nuevos vampiros llevan chupas de cuero y van al instituto


Los relatos sobre vampiros pasaron de ser un subgénero de terror para constituirse como género en sí, el nacimiento del género tiene lugar en 1897, con la publicación de Dracula, esta archiconocida novela originó un género literario, cuyos temas principales serían la sexualidad, la violencia, el romanticismo y la nostalgia. En el año 2005 se produjo un boom en todo el mundo, este tipo de novela volvió a ponerse de moda gracias a la revisión del género por parte de Stephaine Meyer. De esta forma el género se reconvirtió en un superficial relato romántico lleno de clichés y que salvo que tengas 16 años o dicha edad mental, causa vergüenza ajena al lector o espectador de dicha obra en la obra original(Crepúsculo) o en las obras derivadas que han tratado de aprovechar el tirón.

Ustedes diréis a que viene esto, no es este un blog sobre televisión, pues sí, pero es que la televisión no es ajena al género tanto en la concepción original como en su nuevo concepto adolescente. Probablemente la primera serie de éxito en la televisión moderna con esta temática fue Buffy Cazavampiros, la popular serie de Josh Weldon estrenada a finales de los 90, y que nos daba una versión “teen” del género vampírico. Recientemente contamos con estrenos como Moonlight, procedimental que si no recuerdo mal no duró ni una temporada emitido por la CBS, del cual solo vi un par de capítulos sueltos en televisión, uno de tantos procedimentales insustanciales. Y como no True Blood, vampiros en la américa profunda que han inventado una sangre sintética para poder integrarse en la sociedad. Serie muy recomendable en sus 2 primeras temporadas a día de hoy un engendro inclasificable, a la que la excusa de reírse de sí misma no le vale. Finalmente y entrando al tema que nos ocupa en el año 2009 comenzó a emitirse la serie The Vampire Diaries. Y es que era extraño que con el boom de la novela Stephaine Meyer, no se intentase hacer algo parecido en la televisión. Y es indudable que la serie de la CW le debe mucho a la obra antes citada. Sí amigos también va sobre un vampiro que va al instituto, ¿Cómo? ¿Los vampiros no se queman al sol? Pues con un anillo mágico, ¿Y para qué va al instituto, un tío que tiene más de 100 años? pues porque está enamorado de una chica forever and ever, y sí él también es un “vampiro bueno” que debe controlar sus instintos de “vampiro malo”. Así que se dedica a chuparle la sangre a los cervatillos y conejos del lugar (no penséis mal, recordad que es un vampiro bueno)

La pregunta ahora debería ser, ¿entonces por qué seguiste con la serie, al ver semejante cuadro? O mejor dicho ¿Por qué la empezaste si quiera? Pues bien, fueron muchas las entradas en diferentes blog que leí hablando muy bien de la serie, pero fue la recomendación de la twittera Efibi, la que terminó por hacerme entrar en Mystic Falls. A lo mejor sin su recomendación hubiese probado con la serie más tarde o más temprano, debo decir que pese a que no puedo con crepusculadas como habréis notado, el género vampírico es un género que siempre me ha llamado la atención.

Sin duda alguna, sin la instancia de los twitteros a que siguiese pese a los horribles 5 primeros pilotos, hubiese abandonado la serie sin pestañear. Porque mira que son malos los capítulos, el que no los haya visto no se puede hacer una idea… Por recordar algo, tiene un momento los momentos cursis con el diario con música de anuncio de compresas, que puede provocar empacho no, hiperglucemia. Una vez superados los 10 primeros capítulos la serie se hace sorprendentemente entretenida, y digo sorprendentemente porque ni los protagonistas son nada del otro mundo, es más la mayoría me causan antipatía salvo Damon Salvatore, el psicópata con más estilo de la televisión actual. Sí, es un hijo puta de mucho cuidado, pero lo hace con estilo, bebe wiskhy solo, sin hielo en la barra y lleva chupa, sus intereses son solo él y como el mismo dice hace lo que quiere porque puede. El ritmo de la temporada es tan frenético que se suceden hechos para 3 temporadas en los 22 capítulos, muchas veces consiguiendo que me confunda entre tanta reliquia y tantos vampiros resucitados.


Lo más sorprendente es que pese a todo lo que estoy despotricando me vi los últimos 10 capítulos en 3 días, los guionistas reservan para este momento lo mejor de la temporada, dejándonos “Cliffhanger” casi, a cada final de episodio, dejándome enganchado a la serie, sin casi darme cuenta.

En cuanto a cómo valoro la serie, aquí me surge un dilema o bien valorarla como lo haría con cualquier otra serie, ajustándole el mismo baremo que a Breaking Bad o a Boardwalk empire por poner dos ejemplos, o bien valorarla como lo que es una serie que no pretende ser más que un entretenimiento.

Si lo que queréis es pasar un buen rato sin calentaros demasiado la cabeza no dudéis en poneros con The Vampire Diaries, la serie se ve bastante bien, no es casualidad que a día de hoy esta serie sea el buque insignia de la cadena CW. Solo te exige un esfuerzo hacer caso omiso, en primer lugar a ese inicio horrendo de temporada, borradlo de vuestra memoria y por otro no buscar personajes con personalidades complejas o en dilemas existenciales, es una serie “teen” y por lo tanto, los personajes tienen los mismos estereotipos que cualquier otra serie del mismo estilo. Por último me gustaría hablar de su banda sonora, no sé si os ocurre lo mismo que a mí, pero me da la sensación de estar escuchando la misma canción una y otra vez, no sé si cambiará en las siguientes temporadas, pero en lo que respecta a esta, me ha parecido malísima.

No veo en esta serie nada nuevo, especial, o digno de mención. Aunque como antes he dicho como entretenimiento funciona y bastante bien. Un argumento en el que no hay tiempo para el respiro, acción, chicos y chicas todos muy guapos y guapas, son algunos de los motivos que puedo dar para verla. Recomiendo esta serie a aquellos que busquen una serie ligera y si os gustan las series de temática “teen” y de vampiros, no dudéis en pasaros por Mystic Falls.

Nota: 5´5

Lo Mejor: Su tramo final de temporada y Damon Salvatore, el “Bad Boy” de los Salvatore tiene mucha culpa de que la serie me consiguiese enganchar finalmente.

Lo Peor: La banda sonora, Esos primeros cinco capítulos, horribles, dan vergüenza ajena.